servir, camina de la mano del castigo,
del menosprecio,
de la ira solapada,
de la envidia de los ojos cansados
que reflejan la herida del alma,
castrada y atrofiada,
por el fulgor que escapa de los edificios.
Espíritu véngame
Por el dolor padecido
Que aún sangra de mis ideales,
Que aún sopla de mis yagas,
carne que se cocina en mi sangre.
Con mis últimas energías,
Lanzo mis alaridos de desagravio,
A pesar de mi partida,
No he sido derrotado.
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4 comentarios:
estimado... la única lucha que se pierde es la interna, y somos muy jóvenes para eso, aún hay tiempo de la política al fondo de un mal vino en caja, aún podemos subir el tono por una idea, aunque después de las copas la olvidemos y terminemos abrazados al retrete con nuestro enemigo de turno, aunque debo admitir que después de leerte: no sé si me hago el ánimo de salir a buscar empleo mañana, tal vez piense en sus sugerencias del otro día. Un abrazo estimado.
Con ese espiritu y ese sentido del humor envidiable que me hace sonreir cada vez que lo leo, y cada vez que me viene a cantar a mi blog (Arjona??), usted JAMAS sera derrotado...el problema es de los envidiosos, no de usted.
Usted sobrevivira y nunca dejara para mi de ser un gran PROFE.
Un beso con ganas en su frente sufriente con este verso que me dejo de cama (y le digo que a petra pulenta no es facil dejarla asi)
SU amiga
PETRA PULENTA
Es lo importante, "No has sido derrotado"
besos y abrazos
Partir no es siempre escapar, ni ver espaldas al frente. Un nuevo camino antecede ojalá mejores horizontes, dejando atrás la rabia y la venganza, y guardando aquellos ideales y el alma imposible de castrar.
Mirar adelante...
Cariños
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