lunes, noviembre 26, 2007

Resaca culposa después de un viaje por el tiempo



Siento que el agua agoniza en mis entrañas, el malestar espiritual se posiciona en mi cabeza como un gran mural de la Brigada Ramona Parra, estampando sus imágenes de rostros desquiciados, deformes, llenos de terror y locura, facciones toscas, rojizas y deformes que me gritan.

- estas perdido…
-loco vas por la senda equivocada…
Estás loco… loco … loco y solo… sólo … sólo… así nadie te va amar jamás… jamás, jamás...
-cuidado con el anarquista enemigo del pueblo

Esas palabras giran en mi mente como un remolino de agua de un servicio higiénico. La mierda flota en los fluidos amarillentos resistiendo al destino inmisericorde de la cadena, mierda prisionera de la celda de inmaculada loza.

Siento que el vacío espiritual me acompaña hace años, no puedo sacarme el lastre de no encajar en el molde social o será la carga genética que me predispone a la bebida. Seré victima de los brindis de mis antepasados, aunque sea así los libero de culpa. La bebida por cierto no es la verdadera culpable, solo es un síntoma de mi desesperación.

La desesperación de no tenerte.
De haberte perdido.
Te necesito y no estás.
Te extraño y no estás.
Te deseo y no estás.

No recuerdo tu cara y tampoco tu cuerpo. Qué amaré, qué se ama. Que amé.

Amé la posibilidad de un futuro contigo.
Amé el placer de tu carne.
Amé tu imagen.
Amé tu necesidad.

En estos momentos de locura pos etílica me gustaría pensar que amé los encuentros y la entrega aunque en realidad no tengo la más puta idea.

A veces pienso que la culpa es mi única manera de renovar mi espíritu, la culpa es para mi más importante que el dolor, o es una variante del dolor que se disfraza de culpa. Creo que esa sensación de incertidumbre en mi forma hueona de aprender de los sinsabores del alma, una forma de lectura braile para mi sensibilidad. La culpa me impulsa como una maquina del tiempo, comienzo a beber, desaparezco y aparezco en otro lugar sin saber por qué y toda esa ausencia de recuerdos y de seguridad me envía a una parcela de mi infierno.

Te amé…pero anoche igual me lancé a todas en busca de placer disfrazado de desesperación de delirum termens, buscando a mi amada inmortal y como vil hueón para variar me quedé sin nada… sólo con mis dolores culposos de mi maldita resaca.

8 comentarios:

Roberto_Carvallo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
siempre_soy dijo...

A veces me gustaria cambiar este uniforme de piel humana que me entregaron al nacer y que a pesar de que llevo años tratando de adaptarme a él, aun no lo consigo...

para que veas que no eres el único que siente que no encaja

saludos !!!

Diana dijo...

Que honesto tu texto... quedé plop!, cuanta gente se siente como tú, un poco sin pertenecer a nada... no sé si estará bien o mal, solo se siente(creo)
suerte en estas semanas..


besos

Unknown dijo...

Siempre me ha intrigado quien es el eterno comentario suprimido, me intriga tanto como esa contradicción entre buscar y desear el amor desesperadamente y al mismo tiempo ahogarlo en siestas y alcoholes. Pero hay un paso...te muestras enamorado...Bello texto

alikis dijo...

Asi es mi querido Profe.
Bebemos porque creemos tener cerca nuevamente esas ilusiones que en verdad son solo espejismos.
El alcohol las trae, es por eso que insistimos.

Saludos nocturnos y algún día nos juntaremos a ver espejismos.

Beatriz Lorca Espinoza dijo...

UUUUFfffff ni te imaginas cuantas veces me he refugiado en lo mismo... Los sentimientos las vivencias son algo único, quierase o no marcan nuestro presente y futuro, generalmente nos damos cuenta cuando ya es demasiado tarde, pero querido amigo solo esta en uno la respuesta a todo, solo esta en uno quitarse la letra escarlata y vivir...

Muchos cariños

Anónimo dijo...

Y qué sería de nosotros sin la Culpa y el Dolor. Sí, con mayúscula ironía y cierta suspicacia inherente; en cierto modo sólo nos sentimos vivos cuando sufrimos y no alcanzamos a comprender y atender a la felicidad en los pocos momentos en que la encontramos... tan sólo alcanzamos a comprender que la felicidad existe cuando la perdemos.
Es un hecho.

Saludos desde el Otro Lado.

Srta. X dijo...

kerido Profe de la materia en la ke tengo + suerte o es en la cual me esfuerzo +?
bueno di con su blog y me gusto mucho su entrada, era sincera, algo trankila, apesar de su viaje de una noche en el infierno.

uuff parese ke los sentidos del viaje, en lenguaje me estan volviendo loca.

la verdad me recordo un texto breve ke aparese en un libro ke lei este año, amor en tiempos de colera de Gabriel Garcia Marquez.
Me gusto n.n ese libro al = ke su entrada

bueno no me keda màs ke felicitarlo

sayonara

pd:ya subi entrada a mi blog!!!!