Las calles son testigo triste
del pasar indómito del tiempo,
en ella camina sólo
la sospecha,
austera y nostálgica.
Buscando con su mirada taciturna
Los recuerdos.
Al pasar los pasos
¿El cemento me devolverá
los sueños?
Las ansias de tocar tus pechos
Y decirte al oído
El anhelado misterio.
Secreto a voces
del insondable deseo,
comunicar con mis manos
lo que con los labios
no puedo,
por qué sólo las calles
saben cuanto te quiero.
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2 comentarios:
El cemento nunca devuelve nada, estimado. Se lo devora todo y las tripas las evacúa en el Mapocho.
si lo sé, y esa es la idea...que el cemento nunca le devolverá nada, es sobre la perdida del amor y cuando este se va no vuelve... y que a la mina le importa un carajo los sentimiento del otro, del ex, y el único que sabrá ese sentimiento son las calles... bueno es paja molina, pero esncontré nostalgico ver las tonteras que escribÃa cuando era más pendejo.
adios estimados..y es verdad el cemento tapa, cubre, devora, pero nunca devuelve nada.
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